Extraños sucesos de hoy y todavía

Si el salado olor a muerte

tocara a mi puerta

Yo le diría: vamos a mi mundo

y lo distraería para que se pierda en el,

me escabulliría,

correría con mis pies alados.

Si el tierno corazón de cupido
vendría a buscarme,

lo llevaría a conocer a la muerte

para que ellos dos se entiendan

y ya se olvidarían de mí.

Si en cambio, viniera el olvido

lo pondría en un pomo

lo congelaría

para que nunca pueda salir

porque somos nuestra memoria

intacta.

solo así podemos vivir,

somos el recuerdo

de una noche de verano,

cálidos cuerpos juntos

retozando al compas

de la música de un hindú.

Si vinieras tú a buscarme

Te presentaría a la muerte,

a cupido, al olvido

para que te mezcles con ellos

y saber que has desaparecido

Así no tendría que olvidarte,

Así no tendría que amarte,

Así no tendría que matarte,

solo no estarías,

en mis sueños distraídos
de noches solitarias.

Pegaso

Simplemente de mi

Salen

Versos

Llenos de tristeza

Llenos de solemnidad

Llenos de melancolía

Y se van pintando al mas allá

Van creando su propio despegar

Como cientos de pegasos

Se van volando de mi realidad

Si mañana no estuviera

-Y no digo que no estaré-

quedarían estos testimonios

creaciones absurdas de mi mente

creaciones de un sueño profundo

de alguien mas

que contempla mi soledad

de alguien que escribe, tal vez

lo que piense

y yo lo sepa contemplar

en este verso final

Macondo

Oscuros versos,

oscuros días,

días de guerra

de complicidad a ciegas

de amores clandestinos

imposibles, apasionados

Así era Macondo,

Con sus tierras fértiles

con su gente linda

con sus desbarajustes

con sus sueños de opio

invertidos en la realidad